DESMITIFICANDO EL PAPEL DEL PSICÓLOGO

Existen una serie de ideas arraigadas en nuestra sociedad sobre lo que significa ir al psicólogo que no suelen ayudar a decidirse para pedir ayuda. Aquí trataremos de desmitificar algunas de estas teorías y daremos pautas para poder tomar la mejor decisión.

  • Al psicólogo van los locos

Esta es la idea que hasta hace no mucho ha imperado, y aún hoy se sigue oyendo, entre risas, pero se dice. Quizá es la que más daño ha hecho a la profesión, la palabra loco tiene una connotación muy negativa y una definición nada concreta. Olvidemos esa palabra: al psicólogo van las personas que tienen problemas emocionales que no son capaces de resolver, por los motivos que sean. Esto no nos convierte el locos, ni en enfermos. Nos hace personas, sencillamente.

  • Mi amigo es mi psicólogo

Los amigos pueden ayudar, por supuesto. Pero hay veces que no es suficiente; si por mucho que hablas con tu amigo el problema persiste, te sigues sintiendo mal o no terminas de resolver la situación, tal vez debas plantearte la ayuda de un profesional.

  • Los psicólogos siempre saben lo que tienen que hacer, y su vida es perfecta.

Esta idea puede generar cierta hostilidad, pero nada más lejos de la realidad. Los psicólogos también pueden tener problemas con sus padres, sus hijos, sus parejas… como el resto de los mortales. Eso no significa que como profesionales no puedan ayudar a otros a enfrentarse a sus problemas.

En mi opinión, los psicólogos deben pasar su propio proceso terapéutico para enfrentarse a sus problemas y así poder después trabajar con las demás personas con la supervisión de sus casos .

 

  • Los psicólogos te dicen lo que tienes que hacer

Mi manera de trabajar no es así. El psicólogo acompaña y ayuda al paciente para encontrar el camino que considera más apropiado, con el riesgo de errar, como en la propia vida. No tenemos el conocimiento supremo de saber cuáles son las mejores soluciones para cada situación, ni éticamente podemos tomar decisiones por los demás.

Desmanteladas estas ideas, ¿qué debo tener en cuenta a la hora de buscar un psicólogo?

  • Pide referencias a amigos, compañeros, busca en las redes sociales, pero te aconsejo que no hagas terapia con un psicólogo con el que tengas cierta relación (amigo, familiar, etc.). Piensa que vas a tener que exponer todos tus miedos, tus emociones más profundas, tus situaciones más dolorosas, y si te va a condicionar que sea alguien conocido, no es buena idea. Además, si le conoces personalmente, tal vez te condicione saber de su vida personal (ej.: ¿Cómo me va a ayudar él si también está separado, o si su hijo se ha ido de casa?). Como hablábamos arriba, los psicólogos son humanos y también tienen problemas, cometen errores… lo que no significa que no puedan trabajar con otras personas, pero el conocer esas partes de su vida te puede condicionar profundamente en la terapia.

 

  • No pienses que en la primera sesión se van a resolver todos los problemas. No podemos tener prisa; el psicólogo debe respetar los tiempos del paciente, y no siempre se está preparado para afrontar todos los problemas; permítete tu tiempo para trabajar de forma segura. En algunos casos, las prisas no son buenas.

PSICOLOGO CONSULTA

  • Cuenta con que de algunas sesiones saldrás muy animado, con ganas de afrontar la vida de frente, y de otras no saldrás tan reconfortado. Hay que pasar por todas las etapas, y todas te servirán para reflexionar y darte cuenta de cosas.

 

  • Si has dado el paso y vas o has ido al psicólogo, no te de vergüenza contarlo. Por dos motivos, será señal de tu fortaleza y además, ayudarás a otros que lo estén pasando mal y todavía tengan todas las creencias de arriba arraigadas, o sencillamente no sepan dónde acudir por no tener referencias de nadie. Comparte tu experiencia, igual que recomiendas al pintor o al electricista que hizo tan bien la última reparación en tu casa.

Si tras leer esto piensas que Enea Coaching & Psicología puede ser un buen sitio para pedir ayuda profesional, te invitamos a que te pongas en contacto con nosotras para tener una primera entrevista gratuita y sin compromiso; y si  estás interesado en no perderse  ninguna de nuestras noticias o publicaciones en éste u otros blogs en los que colaboramos, te animamos a suscribirte a nuestra newsletter. Para ambos casos, sólo tendrás que rellenar el siguiente formulario:

Nombre (requerido)

Correo electrónico (requerido)

Mensaje