QUÉ HAGO PARA SER FEMINISTA

Hace unos días fue el Día Internacional de la Mujer, y ya escribimos sobre ello en este artículo, donde hablábamos de la lucha que aún debe continuar, de nuestro granito de arena en nuestras casas para un futuro mejor y más justo. Luchar por esto ya te hace feminista: igualdad y justicia. No suena tan radical ni exagerado, ¿verdad?

El problema que detecto es en el día a día, que obviamente después se traslada a nuestros políticos, a nuestras leyes y, en general, a nuestra sociedad. Cómo están los roles tan encasillados creo que es por donde debemos empezar a trabajar. ¿Cuántas mujeres, que luchan por un mundo más justo e igualitario en sus palabras, sin darse cuenta aceptan ese rol de cuidado siempre al otro, de ama de casa, de esposa o compañera que comprende y perdona todo, de madre protectora (sobre-protectora, en muchos casos) que «inutiliza» a los hijos y les empuja a buscar parejas que sigan cumpliendo con ese mismo rol de cuidarles, de hacerles la comida, de escogerles la ropa, de recoger su ropa… y un largo etcétera que se os podrá ir ocurriendo a medida que estáis leyendo. ¿Es esto feminista?

Creo importante que cada una de nosotras nos tomemos unos minutos y nos hagamos estas preguntas:

• Qué papel principal juego en mi entorno. ¿Cuido? ¿Me preocupo siempre por el otro? ¿Ayudo por encima de todo, sin tener apenas en cuenta mis necesidades?
• Cuáles son mis necesidades o deseos. Párate y trata de escribir una lista completa con TUS necesidades. ¿Te cuesta demasiado? Una vez la tienes escrita, ¿cuántos deseos son para ti y cuántos para hacer feliz a los tuyos?
• Qué papel jugaba/juega mi madre en la familia. ¿Estoy repitiendo algunos patrones, aunque sean «adaptados» al siglo XXI? ¿Te molesta algunas conductas machistas de tus padres? ¿Estás segura de no estar repitiéndolas?
• Cómo me he cuidado en los últimos años
• Qué pasaría a mi alrededor si yo «desapareciera». Cómo les afectaría,  a nivel emocional, funcional…

Estas son solo unas pocas preguntas que nos pueden ayudar a colocarnos en nuestra realidad, y ver si estamos satisfechas con nuestra vida, si nuestros actos van alineados con nuestras ideas de igualdad para las mujeres. Cuando esto sea así, podremos educar hijos e hijas con esos mismos valores: recuerda que serán los futuros padres/madres, empresarios/as, políticos/as, legisladores… La responsabilidad no es solo nuestra, pero sí creo que tenemos un papel muy importante que podemos aprovechar.

Si te preocupa tu situación o quieres hacer algunos cambios por tu bien y por el de los que te rodean, pero no sabes cómo o lo intentas y no lo consigues, ponte en contacto con nosotras  pidiendo aquí una cita 

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